Sachaqente

Mira nuestras Actividades

Filosofía Ancestral de la salud

Filosofia Ancestral de la salud

En el antiguo Perú, el orden cósmico se organiza desde una perspectiva de cuatripartición. Para asegurar la salud y relacionarse con el mundo externo, cada persona tenía que estar en armonía con este orden.
De acuerdo con esta concepción, la vida depende de los factores de arriba y de los de abajo; y de los factores masculinos y femeninos. Este concepto era comúnmente llamado principio de los cuatro vientos, o también de los cuatro suyos o de las cuatro pachas (fuentes o tiempos) de la vida, que actúan en unidad.

Las cosas y los factores de arriba están asociados a la energía que está detrás de todas las cosas; y los factores de abajo con lo material. De alguna manera tiene que haber una armonía entre lo que está material y lo que está detrás de todo en todo el universo, es decir, un equilibrio entre la energía que hay detrás de todo y lo material, la naturaleza. Y, por otro lado, está el equilibrio entre la parte femenina y la masculino, que está en la naturaleza, pero que también está en la persona y que produce la armonía de la vida, es decir, entre el mundo interno y el externo que se relacionan y lo femenino y masculino, y así las cuatro partes en circulación producen esa no ruptura de la persona consigo misma y con lo demás, con lo que nos rodea, con la naturaleza, es un modelo de convivencia y de desarrollo permanente, es una balanza sutil. Causay puriy.

 

La Medicina Tradicional Andino-Amazónica (MTAAZ) está dirigida a mantener este equilibrio entre estas cuatro partes de la vida. Pues sólo de este modo cada ser humano puede asegurar el orden en su interior y puede dialogar permanentemente con el exterior. Para la concepción indígena, la salud es un estado de equilibrio dinámico y armónico entre el individuo y su entorno ecológico y sociocultural, incluyendo lo natural y lo espiritual en un flujo de energías que conforman la vida. En la práctica asociado a la conducta de los animales cazadores como modelo para la conducta humana.

 

La enfermedad igualmente es concebida como un desequilibrio y/o fragmentación entre estas fuerzas (hucha), en la practica asociada a la conducta humana huidiza que observamos en los animales presa, con sus efectos concretos (síndrome de mala suerte).
Por analogía, en la medicina ancestral, pagos y/o chamanes utilizan también distintos recursos medicinales para restaurar la salud (el equilibrio vital) las energías internas y externas (sami) que fluyan nuevamente y con ella, la armonía y la salud.

Jornada de Etnopsicología y Neuropsicología Universitat Oberta de Catalunya